La voz de la autoridad.

Nuestra vida educativa inicia llena de colores, jóvenes que se convierten en nuestros mejores amigos y profesores que no escatiman fuerzas para ayudarnos a salir adelante, que desarrollan nuestras capacidades y que guardan en sus corazones la esperanza de vernos brillar y triunfar, aunque después de ahí esa no sea más su responsabilidad.

La Universidad tiene un papel privilegiado para ayudar al país a construir procesos académicos efectivos, tomando como parámetros metodologías y estrategias basadas en la ciencia y experiencias de campo. Estos son necesarios para orientar la educación y desarrollar la cultura en direcciones completamente favorables al desarrollo integral humano.

Por otro lado, requieren el cultivo de valores y actitudes idénticos a los que son imprescindibles para los procesos políticos de la participación y la autodeterminación. La universidad, junto a las personas en las cuales recae cada responsabilidad, trae consigo la tarea de inyectarnos actitudes y acciones que prevalezcan en nosotros y nos lleven al desarrollo político de una sociedad encaminada a la paz y la democracia. 

Haciendo una mirada en retrospectiva me pregunto ¿Es importante ir avanzando el modelo educativo con el paso de los años? o bien ¿podemos continuar estudiando lo mismo, de la misma manera con las mismas herramientas siempre?

Las limitaciones que contiene el modelo actual empiezan a romperse en muchas universidades. Comienzan a surgir nuevos programas educativos que valoran la diferencia de culturas, apreciaciones, conocimientos y enfoques. Se integran al currículo los contenidos de género, derechos humanos, ambientales y étnicos.

La universidad, sin ser una empresa, es una organización que funciona en su sociedad y genera impactos tanto sobre las personas que laboran en ella (administrativos, docentes, estudiantes) como sobre su entorno social y natural. La responsabilidad social es el afán de responder de modo ético e inteligente por estos impactos para que sean, en la medida de lo posible, positivos y no negativos"

Los agentes principales en todo esto son las personas que día tras día se enfrentan a los problemas que recibe la universidad para poder desarrollar el plan de estudio planteado, detrás de un escritorio, en una oficina, metidos en su locker cada uno de ellos explora mil maneras de facilitarles la vida al estudiantado para que estos cumplan con eficiencia las tareas encomendadas. 

En los rostros de nuestros encargados se refleja la preocupación cuando se les pregunta por los problemas que encaran a la hora de realizar una actividad tan común como la de pagar la matrícula, la universidad es consciente de los fallos que tiene y a corto o a mediano plazo debe retomar un plan operativo para lograr ir pasándole raya a todas esas deudas que tienen con nosotros que somos el cuerpo mismo de dicha casa de estudio.

Tal como lo expresa Yudelka Corcino encargada del área de registro "Los principales problema que enfrentamos para brindar un servicio optimo a los estudiantes son el sistema informático y la falta de espacio en el área de registro que no ayuda a brindar una atención personalizada". 

Así mismo vemos en nuestros pasillos una cantidad de personas que están monitoreando y supervisando las diferentes áreas  a modo de ir reubicando en otros espacios muchas de las deficiencias que se contemplan con facilidad. 

Por último, sobre nuestra institución de enseñanza superior recae la responsabilidad de supervisar la creación e innovación en materia de nuevas tecnologías. Dichas tecnologías pueden encerrar la respuesta a algunos de los retos que el mundo está afrontando actualmente, pero para aprovecharlas es preciso que los estudiantes estén dotados de las competencias éticas y funcionales necesarias para las mismas.

 La Universidad Católica Santo Domingo está abriendo las puertas a la tecnología y a los avances de la misma, necesita mucho más de eso estamos seguros, pero el hecho de digitalizar mucho de sus acciones nos dan una idea del futuro próximo que pudiese traer la misma.

La aparición de estos retos pueden afectar la visión y misión de la universidad, y despiertan el interés por conocer en que medida penetran en el mundo concreto de la educación, como se perciben y que ecos se advierten en la comunidad universitaria. 

En su misión la universidad destaca la contribución que realiza en cuanto a la tutela y desarrollo de la dignidad humana y de la herencia cultural mediante la investigación, la enseñanza y los diversos servicios ofrecidos, mientras que en la visión propone patrocinar y a la vez impulsar una formación académica, profesional y científica de alta proyección comunitaria acorde a la vocación y a las aptitudes personales de los miembros de la comunidad universitaria. Estos retos influyen de manera directa en el desarrollo socio-económico del país a través de la preparación de técnicos superiores y profesionales que emitan soluciones factibles a los problemas de nuestra era.

Sea tarde o temprano, las evidencias salen a luz, “no  podemos tapar la luz con un solo dedo”. Una frase que abarca mucho, y que deja en evidencia lo expuesto en el material.

Todos los días debemos enfrentarnos a circunstancias diferentes, ya sean institucionales, personales o laborales.

Pero lo cierto es que cuando se quiere superar siempre contamos con alternativas y posibles soluciones para salir adelante.  Las instituciones que se desempeñan en un rol tan importante como en el caso de las universidades que se encargan de la formación académica de los futuros profesionales, siempre deben mantenerse a la vanguardia, actualizándose y buscando la mejoría de sus docentes y comodidad de los procesos para con los estudiantes, como a la vez con sus mismos empleados. Es por esta razón que las universidades deben señalar los puntos y reconocer cuales son su bajas y sus alta, para mantener al tanto a todos los interesados y en lo más adelante pedir si es necesario la cooperación de todos de ser indispensable.

Por lo tanto estudiantado, como empleados de todas las áreas del plantel, así como el consejo superior que conforman la universidad, deben trabajar unidos y siguiendo el mismo horizonte para poder dar un mejor servicio, tanto en cantidad como calidad.

Debido a esto, los estudiantes deben ser concientizado de la importancia que tiene para todos seguir las reglas y guías establecidas en la institución, para que todos salgamos ganando debemos cooperar y participar en las  en las organización de la misma.
Una escuela de enseñanza de educación superior, debe estar comprometida con la calidad de sus servicios, y que mejor forma de poner en marcha proyectos que día a día nos beneficien a todos, es por esta razón que nos corresponde decir que según las personas entrevistadas anteriormente, nos señalan detalladamente cuales son las preocupaciones de los diferentes departamentos que forman la Universidad o en consiguiente una muestra de estos.

De igual manera nos place ver cómo estos departamentos están buscando opciones para poner  en marchas todas las  posibles soluciones  para mejoría y mejor desempeño con estrategias diferentes según el tipo de departamento.

Si igual está plasmada la necesidad de parte de la Universidad de que los estudiantes sean más organizados, que preserven lo que ya se tiene, que valoren lo que han conseguido, y que sobre todo sean pacientes en la espera de estos cambios que se están poniendo andar departe de cada departamento.

Entonces, seamos parte del cambio.